La Torre Latinoamericana cumple 50 años

La Torre Latinoamericana, quizá el edificio más emblemático de la
ciudad de México, cumple este 30 de abril 50 años de haber sido
inaugurada.

Fue en esa fecha de 1956 cuando la gigantesca mole localizada en la
confluencia de la calle de Madero con la entonces avenida San Juan de
Letrán -la esquina por antonomasia en aquel tiempo, con su dulcería
Larín en la planta baja- se convirtió en timbre de orgullo de los
capitalinos que así vieron cómo la antigua Tenochtitlán contó con su
primer rascacielos, una gota del lejano Nueva York.


Torre latinoamericana

La esbelta silueta de la singular construcción ha sido en este medio
siglo un icono para los habitantes de la gran metrópolis y un punto de
referencia y admiración para los turistas que la visitan, especialmente
aquellos que trepan hasta el piso 44 para solazarse con la vista que
ofrece la terraza del mirador, recientemente remodelado.

El miércoles pasado, en una celebración indubitablemente de altura,
tuvo lugar el festejo por el medio siglo. Alejandro Encinas, jefe de
Gobierno del Distrito Federal, canceló la estampilla postal
conmemorativa, allá en lo alto de la Torre, y luego se dedicó a
recorrer el renovado mirador desde donde, una y otra vez no dejaba de
lanzar expresiones de asombro ante la magnífica vista, ya que el
anochecer fue generoso y los vientos limpiaron gran parte de la
atmósfera.

Teodoro Amerlinck, ya jubilado pero aún lúcido a sus 98 años de
edad, hizo un recuento de los años de la construcción en los que,
recordó, hubo de lamentarse la muerte de seis operarios. La Jornada

Foto: brain damage

p.d. ayer el Empire State cumplio 75 años.