Britney Spears se encuentra en otro gran escándalo luego de que uno de sus empleados copió el video de uno de sus alardeados encuentros sexuales entre ella y su esposo Kevin Federline y amenaza con difundirlo, reveló hoy la prensa local.
Spears, de 23 años, y Federline, de 28, tratan de evitar que el video casero copiado de su colección personal sea difundido, por lo que ya tienen a uno de sus abogados trabajando en el caso, informó este miércoles un tabloide local.
El video fue grabado por la alguna vez llamada princesa del pop cuando se encontraba embarazada de su primogénito Sean Preston, quien nació el pasado 14 de septiembre, y da cuenta de lo que Spears ha descrito como “el mejor sexo de su vida”.
El empleado que hizo la copia del episodio sexual de la cantante “ha amenazado con difundir un material obsceno grabado antes de que a Spears se le notara el embarazo”, confirmó una fuente citada por la revista estadunidense US Weekly.
Según fuentes allegadas al abogado de la familia Federline-Spears, que ha debido ver una copia del video de sus clientes, la aventura de la guapa rubia y su adorado bailarín más que fabulosa resulta entre cómica y un tanto de mal gusto.
Spears comenzó a alardear de su vida sexual desde que inició su apasionado romance con Federline, y sorprendió aún más cuando apareció en su reality show “Britney & Kevin: Chaotic”, implorando por intimidad a su entonces novio.
Por lo pronto, la recién estrenada mamá ha acaparado los titulares de la prensa con su excéntrica generosidad, al sacar a la venta toda una serie de artículos de ropa, raros artefactos y hasta muebles, para ayudar a los damnificados del huracán Katrina.
La controvertida estrella anunció la venta, que abrirá en el sitio electrónico EBay el próximo viernes, a través de su propio portal.
Entre las piezas que la sexy cantante pondrá a la venta se encuentra un codiciado brassiere con incrustaciones de pedrería que usó en uno de sus videos, así como la popular playera que utilizó para la premier de la película “Charlie & The Chocolate Factory”.
Sin embargo, las excentricidades a rematar incluyen también regalos que la cantante le ha hecho a su marido, un sofá de seis cojines, uno de sus minúsculos bikinis y hasta un diafragma.
Spears, originaria de Kentwood, Louisiana, se decidió a vender los artículos para ayudar a los damnificados por el huracán, luego de que al querer enviarlos a manera de ayuda a un centro de acopio, le dijeron que no recibían cosas usadas.
Aquellos que adquieran los objetos personales de la señora Federline deberán firmar un acuerdo para asegurar que no los re venderán, así como para deslindar a la cantante de toda responsabilidad en caso de que usen las cosas sin esterilizarlas.