Profesor mexicano asesoró a los creadores de Google

Un profesor mexicano coordinó y dio asesoría académica al proyecto que
dio como resultado la creación de Google, el buscador de más éxito en
Internet que en pocos años se convirtió en una de las mayores compañías
del mundo.

Héctor García Molina, fungía a mediados de la década de los noventa
como director del Laboratorio de Ciencias Computacionales de la
Universidad de Stanford, en California, cuando los entonces estudiantes
Larry Page y Sergey Brin, los ahora multimillonarios fundadores de
Google, desarrollaban su tesis doctoral.

La investigación de Page y Brin se centraba en el desarrollo de un
mejor método de búsqueda en la Internet. Su coordinador y asesor de
proyecto era el mexicano García Molina.

"Yo me encargaba de proporcionarle los fondos, tenía el dinero del
proyecto", recordó el profesor originario de Monterrey, en el estado
mexicano de Nuevo León.

"Ellos eran estudiantes muy brillantes, muy inteligentes", dijo, en una entrevista telefónica con Notimex.

The Search, (La Búsqueda), un libro del periodista John Battelle en el
que relata la fundación de Google, cita que García Molina dotaba a Brin
y a Page del equipo necesario para su investigación y que incluso llegó
a donarles una computadora.

En esa época, Page trabajó también directamente con García Molina en el
estudio y desarrollo de un sistema para detectar copias de documentos
en grandes bases de datos, útil para localizar violaciones a los
derechos de autor.

En la entrevista, García Molina recordó esa época sin jactarse de su
amistad con quienes ahora son dos de los hombres más ricos del mundo.

"Tengo buenos contactos en Google", dijo al hablar con modestia de su
relación con los fundadores de la compañía y con otros estudiantes que
han pasado a ocupar puestos de importancia dentro de esa firma.

"Google nos ha sorprendido a todos", afirmó al referirse a la rápida
expansión de la compañía, surgida de un trabajo de tesis doctoral en
las aulas de Stanford.

El mexicano ha preferido la academia al mundo corporativo, a pesar de los éxitos empresariales a su alrededor.

Desde 1979 ha investigado el campo de las bibliotecas digitales y los
sistemas de bases de datos al mismo tiempo que ha desempeñado varios
cargos en el Departamento de Ciencias Computacionales de la Universidad
de Stanford, el cual dirigió entre 2001 y 2004.

Desde la facultad en Stanford y también en la Universidad de Princeton,
García Molina ha atestiguado como su campo de investigación,
relacionado a las bases de datos y la Internet, ha creado en los
últimos 15 años rápidas y múltiples fortunas.

"Me gusta mucho ser profesor, me interesa mucho más", dijo al responder
cuestionamientos sobre si ha sido tentado por el dinero que han
generado algunas de las empresas relacionadas al campo de la
computación.

García Molina, reconoció sin embargo que mantiene contacto con varias
compañías, como asesor y funge en la junta de directores de otras como
Oracle y Kintera.

Sus aportaciones académicas le han valido para que este año, la revista
Hispanic Bussiness, lo colocara dentro de su lista de los 100 hispanos
más influyentes en Estados Unidos.

El profesor de 53 años, egresó en 1974 como ingeniero electricista del
Instituto Tecnológico de Monterrey, cuando empezaba apenas a
desarrollarse la computación.

"No me metí de lleno en eso, pero sí me tocó en la carrera tener contacto con las primeras computadoras", dijo.

Recién egresado, a los 21 años, vio la oportunidad de continuar
estudiando y decidió emigrar a Estados Unidos para cursar su maestría y
doctorado en la Universidad de Stanford.

Fue durante sus estudios de doctorado que García Medina se enfocó a la
investigación y desarrollo de los bancos de datos y bibliotecas
digitales.

El mexicano había llegado en el momento propicio al lugar adecuado para ello.

Stanford se encuentra en el Valle del Silicón, en California, y en ese
entonces la industria de la tecnología de la información comenzaba a
despuntar precisamente ahí en ese sitio. "Recibí muy buena educación
aquí", reconoce.

García Medina ha publicado en los últimos 25 años cientos de
investigaciones, varias de las cuales han sido editadas en libros. El
profesor es invitado con frecuencia a ofrecer conferencias relacionadas
a su campo de investigación.

El mexicano confía en que los proyectos que actualmente desarrolla
junto con otros científicos computacionales, "van a ser las cosas más
interesantes", alrededor de la Internet en los próximos años.

Explicó que se busca hacer las computadoras más fáciles de usar y hacer
la información más accesible y más fácil de entender.

Su carrera en Estados Unidos ha recibido múltiples reconocimientos
entre los que destaca el Premio a las Innovaciones de la Asociación de
Maquinaria de Computación ACM SIGMOD en 1999. Notimex