Hugo Chavez retirará concesión a RCTV

Hugo Chávez justificó ayer la medida de finalizar con la licencia de
transmisión del canal privado Radio Caracas Televisión (RCTV), al
argumentar que la emisora instó a actos de desestabilización política y
social en los años 2002, 2003 y 2004, colaborando así con el golpismo.

William Lara, portavoz del gobierno venezolano y ministro de
Información, aseguró que la campaña de RCTV fue tan intensa que
especialistas en psicología clínica diagnosticaron que un sector de la
población resultó afectada por una “perturbación mental” llamada
“disociación psicótica”, esto como consecuencia de “utilizar la mentira
para manipular a los televidentes”.

Lara argumentó que la medida de no renovar la concesión a la
cadena de TV una vez que culmine en marzo de 2007, tiene fundamentos
legales, legítimos y constitucionales.
Por su parte el dueño del canal, Marcel Granier, negó que la licencia
termine en 2007 y, por el contrario, aseguró que tiene vigencia hasta
2022, por lo que denunció al gobierno chavista de tratar de intimidarlo
con este tipo de amenaza.

En tanto, el presidente de Fedecámaras, José Luis Betancourt, solicitó
al jefe de Estado Hugo Chávez reconsiderar su decisión de no renovar la
concesión de RCTV. El empresario dijo que esta decisión no crea un
clima propicio para las inversiones nacionales y foráneas en el país y
generar respuesta a las necesidades fundamentales de la población:
inseguridad, desempleo, salud.

La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó ayer la
decisión de Chávez, de no renovar la licencia de transmisión a la
televisora a la que calificó de “golpista”. “Este nuevo atropello a la
libertad de prensa y de expresión es simplemente una medida de
represalia contra una voz crítica que le estorba (a Chávez)”, dijo en
un comunicado Gonzalo Marroquín, presidente de la Comisión de Libertad
de Prensa e Información.

A esta protesta se sumó la organización Reporteros sin Fronteras (RSF)
y la calificó de “grave atentado al pluralismo editorial”. Mediante un
comunicado desde su sede en París, RSF aseguró que la decisión de
Chávez “pone de manifiesto la existencia de una voluntad de
interferencia mediática”.