El Wolverine de Pemex”, su foto se difundió en las redes sociales en la que se parece al superhéroe y esta ayudando a un lesionado del estallido del jueves 31 de enero en el edificio de Pemex.
En la vida real, Ricardo Fuentes es un trabajador que tiene 22 años en el área de mantenimiento de la paraestatal, quien se considera afortunado de haberse salvado por minutos de estar entre los lesionados y que todavía no se repone de la impresión.
Como siempre, ese día entró a las 08:00 horas a su oficina, que se encuentra en el edificio anexo, y salió a las 15:30, pero antes de irse fue a la Torre a entregar unos documentos. Ya estaba por salir cuando escuchó el estallido y sintió la fuerza de la onda expansiva.
“Me tardé en salir, mi hora de salida es a las tres y media, nada más que en lo que me cambiaba y entregaba algunos papeles se me hizo tarde (…) nunca he visto un incidente tan fuerte, algo así te sobrepasa y no sabe uno qué hacer, esa mañana fue como cualquiera, uno viene a trabajar”, comenta Fuentes.
Una nube de polvo llamó su mirada hacia donde encontró a varias personas lesionadas, por lo que con ayuda de una silla de oficina sacó a dos de ellas por un acceso que da hacia Marina Nacional, justo donde fue capturado en fotografía.
“Sentí la vibración y volteo y veo a compañeros caídos, yo creo que como todos te quedas pasmado en una situación así, ya después cuando empieza a correr la gente me pregunté ¿qué hago?, corres o te regresas”, recuerda.
No siente haber hecho nada extraordinario ni heroico, sino lo que le nació al ver a la gente en apuros.
“No estás preparado para ello, pero todos mis compañeros de servicios son personas muy gratas, son personas de mucho valor humano, siempre hemos tenido la visión de que nadie se queda atrás, o salimos todos o nadie sale, esa es la bendición más grande que tiene un petrolero”, afirma.
Justo cuando ayudaba a estas personas fue fotografiado. Que se pareciera al personaje no fue coincidencia, pues desde adolescente tuvo gusto por el personaje de los cómics.
“Todos mis amigos me dicen Logan, desde que iba en la prepa, esto de aquí arriba (su cabello) me lo peino para atrás y salen solos, luego me río de estas situaciones porque en la oficina me dice que parece que tengo cuernos en la cabeza y yo le contesto que me peino así para que no se me vean”, comenta entre risas.
En cuanto a la comparación con la escena de la película de los X-Men, Fuentes asegura que sólo se trata de una coincidencia en la que alguien puso mucha atención.
“Sí vi la comparación, yo creo que me aventé mis 15 minutos doblado de risa, de hecho, el cuate que llevo en la silla es el hijo de la chava a la que se le ve el pelo canoso, de hecho no era tan canoso, lo que pasa es que traía polvo que se levantó del edificio”, dice.
Pero Ricardo cree que las comparaciones salen sobrando cuando una simple coincidencia puso varios factores en un sitio.
“No es porque me haya metido para buscar fama, ese momento así lo exigía, era lo que se necesitaba y el cuate que sacó la foto podía estar o no podía estar e igual hubiera pasado desapercibido, fue una serie de coincidencias las que se van dando”.
Via: Agencia Reforma
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