El día de hoy en el diario Record, aparece una dura columna de Luis García para el Cruz Azul y Guillermo Álvarez luego de que quedaran fuera de la liguilla.

Recordemos que desde 1980 a 2016 solo han conseguido 1 titulo de liga.

A continuación la columna:

Desastre

Contrario a lo que sucede en esta confusa institución, se agradece que por lo menos tu, Tomás Boy, le llames por su nombre a las cosas. Fracaso fue lo mencionaste después de la dolora y gris actuación de los tuyos ante Tigres, y si, fue un fracaso monumental, otro mas en esta desangelada organización.

Razonando sobre los frecuentes y groseros tropiezos que tiene este club, concluí que su máxima problemática es que no tienen rumbo, no poseen ideología definida, transitan cuales almas en pena, no poseen políticas deportivas, sencillamente son un bodrio indefinido.

¿En que carajo se basa su filosofía? ¿Que carajo son como entidad? Es tan funesta su lectura del interior que no saben que son en realidad. No contratan a los mejores mexicanos, no producen futbolistas propios, sus fuerzas básicas son un atroz pantano, no traen a notables foráneos, cambian de entrenador sin definir perfil, y luego  preguntan porque les va mal; obviamente no les puede ir bien cuando son groseramente inútiles eligiendo y gestionando el recurso humano.

La burda idea de que un hombre en solitario podria recomponer años de malaria es otro ejemplo de ineptitud, pensar que tu, Tomás Boy, por ser un personaje con bravío temperamento limpiarías por arte de magia el asqueroso cochambre acumulado en décadas de mandatos, fue inocente y torpe.

Los grandes proyectos se van construyendo palmo a palmo, decisión tras decisión, ninguna salubre edificación se levanta en días o meses, y aqui pretenden todo lo contrario.

Guillermo Álvares, es tiempo que te des cuenta que eres obsoleto como dirigente, que  tu incompetencia es patente y que se ha permeado hasta las entrañas de la institución, siendo lo mas triste que gustas responsabilizar a los demás de tus múltiples desatinos, buscas culpables cuando uno de los máximos villanos de esta cruenta novela lo puedes encontrar parándote frente a un espejo.

Es una pena observar como cada semestre arrastran el prestigio, como cada semestre vuelven a ser ese equipo abstracto e indolente que pugna por salir de la inopia sin tener la menor pista de como salir de la misma. Da pena verlos a la distancia intentar luchar contra sus fantasmas y sucumbir en la pelea durante cada round.

Pero esta claro que no han trabajado con creces para merecer lo que hoy tienen. Cuando los cimientos están roídos y los pilares están infestados de gangrena, no queda mas que tirar la casa y dejar de parcharla.

P.D. Carlos Guerrero opino algo similar en un video comentario: